Cubículo roto
Quiero sentarme
solo quiero sentarme
y mirar como escapa esta noche,
como salta entre tejas,
como ahoga el vocablo
entre su mano vacía.
La noche me grita canciones
de infancias que sudan el vértigo,
de cielo, ventana y domingo
porque siempre han formado
mi ajado cubículo de estar.
Canciones que siembran hogueras
para hablar con mi sombra,
con mi difuminada compostura
que se riega en la marcha,
que se pierde aprendiendo a perder
y que muere tranquila,
cosiéndose a los ruidos
que escurren
desde la pálida grieta,
que nombran cuerpo.
Quiero sentarme,
solo quiero sentarme,
saberme noche.
Mario Baldizón
No hay comentarios:
Publicar un comentario